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Los drones han aterrizado desde hace unos años en disciplinas tan asentadas como la ingeniería, la construcción o la topografía; suponiendo una auténtica revolución en muchos aspectos. Complementar con estas nuevas tecnologías es clave para mejorar la productividad en los proyectos desde múltiples perspectivas.
¿Cuáles son las ventajas de sumar esta nueva tecnología a la topografía tradicional?
1. El mismo trabajo en menos tiempo
La recopilación de datos con un dron es mucho más rápida que con sistemas de topografía tradicional situados en el terreno. Por ejemplo, un equipo de dos personas puede tardar entre 20 días o un mes en recopilar los datos de 1000 hectáreas. En cambio, se tarda solo un día en sobrevolar con un dron entre 500 y 1000 hectáreas, dependiendo de los accesos y orografía del terreno. En resumen, el tiempo de entrega al cliente se ve reducido considerablemente.
2. Se reducen los costes
La reducción del tiempo de trabajo repercute en una disminución de los costes del proyecto. Incluso, se pueden hacer trabajos topográficos sin tener que cerrar carreteras o vías de tren, tomando los datos durante su funcionamiento, lo que conlleva menores gastos organizativos y logísticos.
3. Llegan a zonas de difícil acceso
Zonas inalcanzables por las condiciones del terreno, o con un alto grado de peligrosidad, no aptas para herramientas de medición tradicional, puede ser sobrevolada por el dron de forma sencilla y segura.
4. Se evitan riesgos personales
La toma de datos de zonas de acceso complicado (terrenos escarpados, depósitos en altura…) hace que los operarios trabajen de forma más segura, disminuyendo considerablemente la peligrosidad en sus tareas.
5. Información gráfica detallada
Con la ayuda de drones se pueden conseguir imágenes de muy alta resolución, georeferenciadas y disponibles inmediatamente. Una vez procesadas mediante un software de fotogrametría consiguen producir modelos de gran precisión y detalle. Los datos generados también pueden ser transferidos a cualquier software BIM o CAD, para que los ingenieros y constructores puedan empezar a trabajar de inmediato a partir de un modelo 3D.
6. Datos más precisos
Mientras que con las estaciones totales y los GPS convencionales solo podemos obtener datos discretos, con el vuelo de un dron, se puede capturar toda la información del terreno obteniendo una nube densa de puntos (aprox 100 puntos por metro cúbico). Esta gran cantidad de datos resulta en mediciones más precisas que pueden ser representadas en diversos formatos (ortofotos, modelos digitales del terreno (MDT, MDS, MDSn), curvas de nivel, nubes de puntos, cartografía 3D…].
Entonces, ¿qué nos aporta la topografía tradicional?
Sin duda, los drones son un gran avance para la topografía y otras disciplinas, y es una tecnología que seguirá desarrollándose durante los próximos años. Pero todavía tienen que mejorar algunos aspectos como la duración de las baterías que permitan hacer vuelos de larga duración y más extensos. Sigue siendo necesaria la combinación de estas nuevas tecnologías con topógrafos altamente capacitados en metodologías tradicionales de toma y procesamiento de datos.
En IDS somos especialistas en la toma y análisis de datos para topografía e ingeniería combinando las tecnologías de vanguardia (descubre nuestros servicios de topografía 4.0). Volamos, analizamos, escaneamos y medimos cualquier superficie, tanto interior como exterior, adaptando nuestros servicios a cualquier tipo de terreno o proyecto (cartografía 3D, grandes obras de ingeniería, estudios topográficos para instalaciones energéticas, canalizaciones y obras hidráulicas, revisiones catastrales…).